Programa Life
Introducción
El Programa de Medio Ambiente y Acción por el Clima (LIFE) es el instrumento financiero de la Unión Europea dedicado al medio ambiente para el periodo 2014-2020. Su objetivo general se basa en catalizar los cambios en el desarrollo y la aplicación de las políticas mediante la aportación de soluciones y mejores prácticas para lograr los objetivos medioambientales y climáticos, así como mediante la promoción de tecnologías innovadoras en materia de medio ambiente y cambio climático. Debe apoyar, así mismo, la aplicación del Programa General de ambiente y cambio climático de la Unión hasta 2020. “Vivir bien, respetando los límites de nuestro planeta”.
El Programa LIFE es gestionado por la Comisión Europea, siendo la Autoridad nacional en el Estado español el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Dirección General de Servicios.
Historia
El Programa LIFE, nacido en el año 1992, es destinado a la aplicación y desarrollo de la política y legislación comunitaria en materia de medio ambiente. El programa hasta la fecha ha desarrollado cuatro fases con éxito: LIFE I desde 1992 hasta 1995, LIFE II entre 1996 y 1999, LIFE III: 2000-2006 y la última convocatoria, LIFE+ de 2007-2013.
Durante todo ese periodo el programa ha cofinanciado más de 4.000 proyectos con 3,4 mil millones de euros. En marzo de 2014, se fijaron las nuevas bases para la fase que llegará hasta el 2017 y que se denomina como LIFE+.
En esta edición se destinarán 1,7 mil millones en total, dedicado el 75%, el subprograma de Medio Ambiente y el resto al de Acción por el Clima. Los objetivos generales son:
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Potenciar el cambio hacia una economía más eficiente en el uso de recursos.
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Ayudar a la implantación de la legislación medioambiental de la UE.
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Apoyar una mejor gobernanza medioambiental en la que participen los agentes locales, ONG y la sociedad civil en general.
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Contribuir a la protección de la biodiversidad.
Proyectos sostenidos con fondos europeos
Hasta la fecha, el componente LIFE Medioambiente (ahora denominado Política y Gobernanza Medioambientales) ha cofinanciado 321 proyectos en España, lo que representa una inversión total de 531 millones de euros, de los cuales la Unión Europea ha aportado 201 millones.
Hay 121 proyectos en curso en España, los cuales cubren un amplio abanico de temas, que incluyen: residuos industriales, municipales, peligrosos y agrícolas; la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero; la calidad del aire y la gestión del ruido; la planificación del transporte y el diseño urbano; la gestión medioambiental integrada; los vehículos para desguace, las tecnologías limpias; los residuos de plástico y embalajes; construcción sostenible, tratamientos de aguas residuales; evaluación y gestión del riesgo; industria y producción (productos químicos, textiles y vestuario, materiales no metálicos y alimentos y bebidas); ahorro de energía, protección de los recursos acuíferos; transporte y almacenamiento y contratación pública ecológica.
Proyectos sostenidos con fondos europeos
Demostración de un proceso para reciclar residuos de fibra de vidrio tirados al vertedero y que producen compuestos de polipropileno (WGF-PP)
El proyecto WGF-PP demostró, a escala semi-industrial, un proceso de reciclaje innovador de los residuos de fibra de vidrio, para usar como refuerzo de termoplásticos. El proyecto primero diseñó y construyó una planta que permitía evaluar la viabilidad técnica y económica y produjo varios productos finales que validaron los usuarios potenciales.
El proyecto WGF-PP puede considerarse un punto inicial en la reducción de los residuos de fibra de vidrio vertederos en la UE, donde se vierten unas 150.000 toneladas de residuos de fibra de vidrio al año. Por tanto, el proyecto está ayudando a reducir el impacto ambiental de estos residuos, así como evitando la producción de nueva fibra de vidrio, y de este modo el consumo de materia primas. También ahorra energía y, por consiguiente, una reducción de las emisiones de CO2.
El uso de fibra de vidrio no virgen u otro material no sería posible en el sistema de producción clásico. Sin embargo, la fibra de vidrio, reciclada con gránulos de plástico, tiene unas propiedades necesarias para aplicaciones específicas en los sectores de automóvil y de los electrodomésticos. En vez de enviar residuos de fibra de vidrio al vertedero, este proyecto ofreció una medida para reutilizarlos en el mercado como parte de un compuesto o composite de plástico. El proceso también permite reciclar residuos de plástico reforzados que provienen de coches desguazados.
El proyecto también beneficia el medio ambiente reduciendo el consumo y la producción de fibra de vidrio, que consumen mucha energía.
Proyectos sostenidos con fondos europeos
Restablecimiento y gestión de humedales: zona de protección especial Canal de Castilla (Canal de Castilla).
Este proyecto se realizó en 34 pequeños humedales y bancos situados en las zonas norte y Campos del Canal. La ejecución del plan se llevará a cabo por parte del Departamento de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, la Confederación Hidrográfica del Duero y otras administraciones e instituciones públicas y privadas.
El proyecto establece acciones activas y preventivas para mantener o restablecer el estado de conservación de los hábitats,las especies y los procesos ecológicos naturales de la zona.Este proyecto está en consolidación con la red Natura 2000.
Alguna de esas acciones son:
-Mejorar los niveles de inundación en 14 humedales bloqueando los drenajes existentes e instalando 12 entradas.
-Realizar un control anual de las poblaciones reproductoras de avetoro, la garza imperial y el aguilucho lagunero.
-Crear 15 140 metros lineales de setos a lo largo de los bancos del canal y en las zonas circundantes plantar 109 087 árboles y arbustos
-Examinar 38 paneles informativos a través de los humedales.
-Crear rutas interpretativas que cubrieron 44 km de Canal y construir dos observatorios de aves del máximo interés ornitológico cerca de los humedales.
Proyectos sostenidos con fondos europeos
Proyecto de demostración de la compatibilidad entre el aprovechamiento en recolección de especies medicinales autóctonas, la conservación del medio ambiente y la viabilidad de dichos cultivos en zonas rurales de los Pirineos.
La demanda de plantas aromáticas y medicinales ha crecido en los últimos años, y ésta tendencia se mantendrá en el futuro. Se trata de un recurso abundante en los bosques del Pirineo y Prepirineo, que es frecuentemente ignorado e infrautilizado.
Con el presente proyecto se pretende que los diferentes colectivos comprendan la necesidad de explotar de una forma más ordenada las áreas en las que estas plantas crecen espontáneamente. También se trata de incentivar a los propietarios agrícolas a considerar el cultivo de plantas aromáticas y medicinales como una alternativa viable en sus actuales explotaciones.
En muchas zonas rurales, la agricultura y el turismo son la principal fuente de riqueza. No obstante, su desarrollo está condicionado por el impacto negativo que conlleva el despoblamiento rural, dado que la presencia de una población estable, garantiza la conservación del ecosistema que el hombre ha contribuido a modelar. Por tanto son aconsejables medidas que dinamicen la actividad económica de estas zonas para fijar la población con la finalidad de proteger el entorno y mantener el espacio rural.
Para desarrollar el proyecto se realizó un estudio previo del medio físico, con sus variables más significativas, con el fin de determinar las parcelas representativas de la zona donde se efectuará la demostración.
La metodología del trabajo tiene dos líneas paralelas. Por un lado se basa en el estudio y seguimiento de las poblaciones autóctonas silvestres sometidas a un determinado ritmo de explotación o aprovechamiento, mientras que por otro lado, se plantaron parcelas con plantas medicinales y aromáticas propias en la flora natural de las zonas, cultivándose de forma biológica, y que servirán para demostrar y divulgar las posibilidades reales de cultivo.